LAS GENERACIONES QUE VALEN UN BILLETE DE DÓLAR
¡Ah de los desgraciados! Maldicen a Dios sabiendo que vendieron sus almas al Diablo, Eso que el dios de los sodomitas nombraron a las vilezas del ser humano. Qué puede decir un infeliz de sus soledades Sino liberar maldades por haber aprendido de ese arte desde muchas generaciones. ¿La mentira? Corruptos pestilentes que hablan del tedio de la vida De lo absurdo que es estar aquí A sabiendas que hay una verdad superior Que obviaron para poder comer como cerdos, Hacer el amor como libertinos Y embriagarse como perdidos. ¡No, no me hablen de los eruditos, ellos nunca pretendieron salvar a este mundo! Esos libros donde solo ponzoña se encuentra Laureados con el Premio Nobel No son fracasos de luchas en medio de la humanidad, Son laureles podridos impuestos para desmoralizar más al hombre. ¡Ah, de los desgraciados! Se quejan tanto de sus dolencias y hablan de injusticias ¿No los vi en las calles de las prostitutas como tales? Entre lujos, v