EL FIN DEL AMOR
Para mí, las muchachas más bellas, no merecen una segunda oportunidad, es decir, un buen orgasmo me enseña que ya fue, que debo saciar mis apetitos sexuales con otra muchacha igual de bella, no escribo más bella, porque conozco a las de belleza superlativa. Entonces, ahora que he revelado todas las formas científicas y los remedios caseros para hacer que el menstruo o la regla baje para evitar todos los embarazos no deseados, si he escrito hasta el cansancio que percibo con suma claridad los orgasmos de mis mujeres llevando siempre preservativo, que a los 47 años se puede disfrutar de muchachas veinteañeras sin tener algún vínculo o compromiso con ellas, que no tengo hijos por tanto y no necesito afecto si al conocer a una mujer después de haberla hecho mía, entienda que es un error el tratar de conocerla, que callada despierta el deseo sexual y es mejor así, que se pierde mucho tiempo enamorando a una muchacha para luego tener que aguantar sus reproches, su mal hum...