Julio Mauricio Pacheco Polanco (EL VARÓN QUE RECUPERÓ SU FELICIDAD)

La muchacha fue descubierta en el espejo Y contempló unos ojos grises únicos Y entonces pensó que merecía lo mejor -al verla pude ver todo lo que sufriría- -ella no sabía que sus ojos no serían de ese color siempre- -que el color de los ojos no tienen la llave de la felicidad- -que cuando se envejece nada queda de la belleza- ¿Puedes salvarme el día con tus ojos grises cuando todo ha sido mierda? Pero no, crees que lo mereces todo Y que lo que les pase a los demás no tiene importancia. La muchacha tiene la piel muy blanca Y cree que toda su vida será así -las he conocido iguales en los burdeles- -las he conocido negras de tanto Sol en las tardes de la desesperación- -en las noches donde se fueron con el primer tonto por temor a quedarse solas- Mira que he conocido ya a tantas ¿No me hablan de lo arrepentidas que están? Lo extraño es que no saben de qué Quizá nunca supieron qué querían Que más importancia tenía el traje o el peinado

Solo te queda ser amada por tus amigas Sabes que ninguno de nosotros te amaremos ¿No es mejor una veinteañera a una como tú que ya no sabe amar? Pero qué es el amor A mis casi 48 años creo que es solo sexo Quisiera creer que después de hacer el amor te quedarás para siempre O que yo no desee a otra muchacha Y a la primera discusión vaya a hacerle el amor. Llegando a los 50 años es más fácil decirte: ¡vete a la mierda! Total, si no tienes ordenada tu vida Cómo pretendes que yo lo haga si no das oportunidad a ello. Y así, te reúnes con tus amigas de café Y entre ustedes se dicen que son muy lindas A pesar de saber que se mienten A pesar de saber que durante toda su juventud se odiaron Y se pelearon por los mismos hombres O por querer demostrar quién era la más bella Quién era la que tenía más poder. Y mira, hasta aquí he llegado Para decirte que puedes pagarle a un gigolo para ser feliz Que si gustas me puedes pagar a mí Sin que tem

Esas muchachas saben hacer bien el amor Pero no conversan Digo, al menos fuesen humanas, al menos sintieran que hay algo más que orgasmos Que tienen opinión alguna Que hay algo de humano en 2 horas de sexo continúo Pero no, no hay más Las mujeres que pasan de 40 años están llenas de mucho odio Con hijos que no son míos Y todo ese arte de la vileza sutil -suaves los dedos clavaron la daga en el corazón- -nadie se dio cuenta en qué momento fue- No tengo la culpa que les haya ido mal ¿Pedir filosofar es mucho? -no, no pienso aguantar a una treintona que se siente fatal- -mucho menos a una drogadicta que no sabe qué quiere de la vida- Las veinteañeras solo saben hacer bien su trabajo Mira que me voy para los 48 años y ninguna venérea tengo -me pregunto qué es mejor en todo esto- ¿Aguantar a una mujer que tiene muchas heridas? Si yo no las hice, por qué debería cargarlas como mías -mira, no sé qué piensas- -tampoco deseo averiguarlo, l