Julio Mauricio Pacheco Polanco (EL VARÓN QUE RECUPERÓ SU FELICIDAD)

No, no quiero encontrar a un suicida al momento de leer un texto Tampoco quiero encontrar el relato de sexo de una mujer que nunca supo lo que quiso Mucho menos llenar una copa de vino y abrir un libro de otro bebedor Quizás al momento de escribir, no quiero repetir los errores que esos autores cometieron A mis 32 años me había cansado de leer a los clásicos Solo lograban desalentarme ante la vida Creo que cualquier persona sana evita ese tipo de lecturas De lo que debí enterarme nada hallé Y terminé por escribirlo yo A falta de no encontrar autores que respondieran a mis búsquedas Fracasos, errores y alientos que debía tener para enfrentarlo todo No, tampoco quiero encontrarme con escritos enfermos Ni con autores pesimistas que no revelen todas sus verdades Al girar mis ojos veo que nadie escribe sobre lo que realmente pasa Lo que ocurre en la calle oscura por la noche Lo que el policía escribe en su vieja máquina de escribir La manera en

¿Has escuchado algo diferente a lo largo del día? Sí, lo sé, siempre es más de lo mismo Porque todos nos queremos quejar pero no lo hacemos ¿Es tan difícil sonreír? Sin razones, claro que lo es Sobre todo cuando ya no hay posibilidades, oportunidades Cuando el camino que debías recorrer se ha acabado ¿Allí las estrellas brillan sin que a uno le importe, no? ¡Ah, muchacho lector, cuánta verdad en casi nada! Te diré que el mérito no está en un nuevo chiste O una novedad para las personas Eso no arregla vidas, y la vida de casi todas las personas está arruinada ¿Tienes algo necesario para lo que padecen los demás? Mira que llevo hace años con miles de escritos y hasta ahora nadie responde Desde cualquier lugar del mundo se siente Pero las bocas no dicen nada Desde un burdel hasta El Vaticano Apenas estamos despiertos, apenas nuestros ojos están abiertos Apenas tenemos fuerza para preguntar si esto es la vida Porque los libros están cerrados

Quizá hay algo que nunca perdone el mundo No importa nada de lo que hagas Así sea condenable o no Eso el mundo lo puede pasar por alto Por algo el mundo es mundo y allí pasó y pasará de todo Pero hay algo que éste nunca te perdonará Te puedes cambiar de sexo O echarte a perder entre los perdidos Quedarte sin sentimientos O ser bien perro Todo, todo, el mundo lo pasará por alto Porque le importará un carajo si eres muy bueno O el más vil de todos Eso le tendrá siempre sin cuidado No le interesa si oras todas las noches O si nunca lo has hecho Solo hay algo que el mundo nunca te perdonará Y lo peor de todo es que tú tampoco podrás hacerlo Ya que el peor error que puede cometer todo hombre Es cambiar, dejar de ser uno mismo Para ser uno más entre el montón Si es que ése es el origen de todos los odios. Julio Mauricio Pacheco Polanco Escritor Todos los Derechos Reservados para Julio Mauricio Pacheco Polanco