NUESTRO SEÑOR, JESÚSCRISTO, EL APARTADO
Dicen que en los inicios de esta Era Todas las muchachas de belleza insoportable Se enteraron de la presencia de Dios en este mundo Y pensaron: ¡queremos tener un hijo de Nuestro Señor! JesúsCristo supo de ellas cuando desde todo el mundo Acudían a Él, solo para contemplarle y escucharle hablar Y Hombre perfecto no hubo jamás Y muchachas tan enamoradas la historia no volvió a escribir Porque desde su estado de gracia Lleno del Amor que nadie predicó nunca Lloraban en su ausencia estas damiselas y princesas A rabiar, gritando al cielo, ¿por qué no podían tener un hijo de Dios? Y en nada de esto Nuestro Señor contempló como un harem Porque les hablaba como solo se le habla a una hermana Como solo se le habla a una niña, cuyo corazón debe ser protegido. Sin embargo, fue tal la atracción que Él tenía Que su presencia era sentida hasta en los confines del planeta Y los hombres preocupados temían por sus pecados Porque había llegado el que tenía q...