NUNCA LO DI TODO POR PERDIDO



Hace 10 años atrás,
La soledad era obligada, no elegida.
Las muchachas apenas podían verme desde las camionetas
Mientras sentado desde las bancas de las avenidas
Me preguntaba qué se sentiría tener el derrier
De una muchacha, apoyado en mí, mientras se conversara con otras personas
Desde cualquier lugar del mundo.
Tuve que ser más fuerte que mí mismo
Para no estar con la última mujer de la ciudad.
Soy yo el que debe elegir con qué muchacha estar, pensaba,
Y no me rendí.
Hace 10 años atrás,
Cuando aún era estigmatizable cualquier trastorno de la personalidad
Supe que las valientes solo van tras los ganadores,
Que a lo mucho, era solo un Poeta
Cuyo conocimiento de la vida se limitaba
A algunos poemas épicos,
Algunas hazañas incomprendidas,
Alguien que nunca estuvo dispuesto a beber y a drogarse
Para estar dentro del grupo de personas
Donde podría hallar el amor de quien creyera en la poesía,
Sin duda una muchacha tóxica que creía en lo oscuro,
Que amaba lo enfermo, que buscaba un poeta
Para autodestruirse en compañía,
Para tener con quién decirle al mundo que le gustaba estar enferma.
Debí ser un loco extraño para todos,
Porque yo no quería hablar sobre trastornos mentales,
Solo quería ser feliz,
Saber qué se sentía tener el derrier de una muchacha
Apoyado en mi miembro erecto, con jeanes,
En plena conversación con los amigos
En cualquier avenida.
Eran los años del tabaco y la desesperación,
Hace 10 años,
Cuando supe que era necesario vencer,
Si acaso no me sé ahora un vencedor.

Julio Mauricio Pacheco Polanco
Poeta

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Julio Mauricio Pacheco Polanco

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