SABIDURÍA OPORTUNA

Si un erudito estudió buena parte de su vida a los grandes maestros

¿Por qué no pensar que aspire a explicar a Dios a su manera?

Así como los que hacen ciencia, buscan la verdad para explicar a Dios tras sus Eureka

El conocimiento del que discierne está tentado hacia su propio Génesis.

La retórica es un arte que engaña a quien ignora de los libros,

El empeño de toda una vida en palabras simples, pueden crear todo un sistema

Para entender la vida, para explicar al hombre, para responder lo que

Curiosamente es agradable a nuestros oídos,

Así, la palabra seduce cuando usada con sabiduría, vence el miedo a lo que es delirio

Y lo dá por sentado como verdad, cuando no tenemos el conocimiento propio de un erudito.

Y no hallarás contradicción en su verbo,

Y el lector buscador hallará coincidencia en lo que no pudo demostrar

Pero, conociendo la inclinación del hombre hacia el mal y el Ego,

¿Por qué creerle a un erudito que dedicó su vida a la verdad

Y en términos claros, persuade con lo que se quiere leer

Cuando se sobrepasan los límites de la lucidez,

Usando todo el conocimiento para dar las respuestas que queríamos leer?

¡Ah, no respeta la razón del que no estudia!

Que la razón no es una sola y, valiéndose de sus estudios

Otra razón querrá exponer donde nadie antes ha dado luces de solución.

Mas es fácil darse cuenta para quienes estudiamos

El hallar lo cuestionable ante el farsante que sabe usar la palabra

Si acaso a lo mucho sea un extraordinario escritor

Como hay muchos a lo largo de la historia

Si es que damos crédito a la Literatura

Y si es que a alguien se le ocurra borrar de golpe el pasado del hombre

Y entregarnos biblias nuevas donde se explique nuestro origen,

La razón de ser para los que no pueden encontrar su norte,

El sentido de la vida, su lugar dentro de este mundo.

De estos peligros ante los eruditos, detrás de sus sabias palabras

La vanidad de ser Patriarcas del pensamiento

Solo confunden a los que erudito tras erudito

Claras palabras le salvan de su locura al incauto lector,

Cuando desde sí mismo nada es entendible en los abismos de su pensamiento

Cuando al encontrarse con sus aportes, el hombre simple,

Crea haber hallado la respuesta que intuyó el hombre entre sus dudas

Si es que debo recordarle amigo y amiga lectora

Que un erudito con aprendizaje

Tiene tantas respuestas para una misma interrogante

Siendo todas lógicas, hasta no haberlo leído en su totalidad

Para saber de sus intenciones, cuando quiso hacer de su nombre

Lo más cercano a la inmortalidad.

Julio Mauricio Pacheco Polanco

Poeta

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Julio Mauricio Pacheco Polanco