EL CLUB DE LOS 27






Tenía 27 años y le decía a mi amigo
“Quiero saber si es verdad todo lo que he escrito”
Mi amigo se quedó mirándome
Eran los noventas y The Doors que sonaba otra vez
Era la gata que me dejó por otro que la dejó
Y era yo y mis poemas
Mis cuentos, mis ensayos
Y la realidad que había encontrado
Tienes religión, fue lo que dijo mientras escupió con fuerza en el piso.
Tengo 27 años y me he dado cuenta que no pertenezco a nadie,
Todos quieren pertenecer a algo o alguien
Tú no, Mauricio, tú no
¿Y eso qué significa?
Que tienes el espíritu más fuerte que los demás
Nadie quiere estar sin el recaudo que buscamos para no sentir miedo.
27 años, lo que significa tener 27 años
Y no hablo de los suicidas
Hablo de los verdaderos hombres
De los que en el ritual deben enfrentar al mundo.
Unos se terminan por casar obligadamente a esa edad
Otros, en este caso, como yo
Solo seguimos lo que late en nuestras vísceras.
Nadie aguanta tanto, pienso ahora
Nadie se queda callado ante tanta humillación y sueños arrebatados
Nadie se conforma cuando te quitan la libertad de elegir
Nadie que se pasó toda su adolescencia leyendo se queda sin hacer nada
Nadie que quiso ser profesional y vio que no encontró un espacio para serlo
Se queda callado, se queda sin hacer nada, se queda contemplando la vida.
El estar de unos es difícil, sobre todo si es que sabes que te obligan a aceptar que estás loco
Cuando en realidad eres solo un rebelde original,
Un rebelde con causa, porque cumplir 27 años
Es no saber que todos los llamados de la historia vuelven a juntarse
Y el mundo espera saber qué dice una nueva generación
Qué gritarán las juventudes desde el último bastión
Cómo brillarán o se agitarán las banderas cuando solo te espera la muerte
Cuando la determinación es la voluntad de los que nacieron para acusar
27 años, hace casi 20 años atrás
La cinta que había grabado en el colegio,
Donde decía que si la vida seguía siendo una mierda
Mi deber era quitarme la vida
No fue abierta ante su inviolable sello
Fue rota con violencia
Había gritado a mis 27 años:
¡Tengo derecho a vivir!
Y sin embargo era un solo muchacho en medio de un millón de habitantes
Alguien que esa misma noche
Honraría para la gloria del Hombre
El viejo grito de Libertad.
Consecuentemente fui internado 5 veces en un psiquiátrico
En contra de mi voluntad
Y así han pasado  un par de décadas
Y ya no hay más maldiciones en mis escritos
Solo el derecho ganado a ser libre,
Y por supuesto, había corroborado que era verdad todo lo que había escrito
Y sigo sin pertenecer a nadie, a mis casi 50 años.

Julio Mauricio Pacheco Polanco
Poeta

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Julio Mauricio Pacheco Polanco

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