UNA KR, TABACOS Y POCO ESPACIO
Hay días en que el barrio despierta feliz
Lo percibo en el olor a orgasmos que inunda las calles
Entonces prendo un tabaco mentolado y me digo: todo está
bien.
¿Cuándo fue la última vez que desee que una mujer
compartiera 90 cm de lecho conmigo?
Fue hace casi 20 años atrás
-no te enamores de mí, yo no estaré todo el tiempo a tu
lado, no soy de los que se aferran-
Quizá dentro de mi estilo de vida esté bien marcada la
necesidad de penetrar en el momento
-estoy acostumbrado a penetrar apenas veo a una muchacha,
por eso soy un solitario-
-el himeneo o los enamoramientos son tontos, te llevo casi
20 años, ¿entiendes eso?-
Mis manos son pequeñas pero de palmas anchas y grandes
Esos senos de talla X Plus caben con comodidad entre mis
dedos
Pero unos senos solo significan el placer de unas horas
Igual un trasero bien formado y gigante, preciso para
aguantar mis manotazos
-no llores en mi pecho por amores pasados, tampoco soy la
respuesta-
-no te he prometido nada, eres tú quien me busca, o tal vez
buscas lo desconocido-
La mujer de cabello cano tan blanco como su rostro me dijo:
“Le entrego el segundo piso de mi casa mas $20,000.00 si se
casa con mi hija”
He pensado más bien en la muchacha a la que tuve que
renunciar amarla
-no, no soportaré esta vez hacerle el amor a ella y después
verla partir-
-de un continente a otro el amor solo significó una botella
de vino en soledad-
-por supuesto que ninguna muchacha había logrado ello-
-por supuesto que tampoco volverá a pasar-
Qué fluye con facilidad en el deseo que se siente en el aire
No, la convivencia es la mejor manera para matar al amor
¿Quedamos en un bonito recuerdo?
Para ser preciso, 5 muchachas en menos de una semana no está
mal
Lo malo es que se me ocurre de vez en cuando liar con
muchachas decentes
-¿habrá alguna mujer muy sexy que sea más inteligente que
yo?-
-los cuerpos desnudos de las muchachas me seducen, pero,
¿hay algo más después?-
Derramado el esperma en el preservativo solo tengo ganas de
levantarme
Coger mi ropa y pasear calando mis tabacos mentolados
Pero en mi apartamento hay otras reglas
Son tan breves las historias de amor.
No creo en lo que dijo Milan Kundera: eso de dormir con una
mano en el seno de la amada
El edredón no alcanza para dos, dicho sea con propiedad
¡No se puede dormir!
¿No aprendí esto hace años antes de empezar con la carrera
de las mujeres?
Julio Mauricio Pacheco Polanco
Poeta
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Julio Mauricio Pacheco Polanco
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