RECUERDOS DEL RELOJ

No creas que solo te pasa a ti

Hasta los hombres más fuertes no se sienten seguros

-para pedir ayuda debes ser una persona muy sorda-

-este es un mundo donde todos la piden a gritos y nadie se da tiempo para oír a los demás-

Ella lo tiene todo planificado menos llegar a los 30 años

-en las oficinas los sexos se humedecen y eso no se puede evitar-

Ella manda a sus empleados pero no puede evitar ser mujer

Las noches desafían todo cuando se lleva una doble vida

-entre horarios de trabajo no hay tiempo para pensar en más nada-

Un alto en un bar y un respiro para recordar qué es la vida

Te pintas los labios de color vino tinto y quieres volver a creer

Y bebes y te olvidas de todo

-los hombres poderosos llegan con angustia a sus camas-

-es difícil dormir cuando se teme enloquecer en cualquier momento-

Haciendo escala en las ciudades más importantes del mundo solo sabes que huyes

-las noches de concierto solo te asegurarán unos labios rotos-

Buscas lo que nadie ha hallado y sin embargo persistes

¡Algo debe haber después de todo!, piensas tan intensamente que todos parecen oírte

Claro, después de todo, el sexo con la misma mujer ya no es lo mismo

Y ellas lo saben también, pero no pueden andar solas por el mundo

-ella cree que nadie podrá conquistarla pero igual teme tener 30 años-

Los recuerdos, esos recuerdos ahora no significan nada

-aterrorizadas van detrás del hombre que es un error-

La mirada de los demás parecen saberlo todo cuando caminan por las calles

-aquí solo hay soledad y ganas de volver a estar solos-

El hombre que llegó a la cima no sabe ahora qué hacer, el sueño fue breve y falso

-hay en su mirada la expresión de un: te gané y te olvidé, pero sabes que no es real-

Al llegar a la casa enorme lo primero que sientes es que es muy enorme

-se paró frente al mar y gritó sin ser oído-

-hay muchachas que nacieron muy lejanas del mar e igual gritan a las montañas-

El aventurero se fue tras del mundo y nunca más se supo de él

-hay noches donde extrañamos todo, pero ese todo es tan poco-

Finalmente nos sentamos a tomar un café en un bar

Para tratar de tener los pensamientos controlados

Las cuentas seguras antes de fin de mes.

Eso es lo que hay, nada más.

Julio Mauricio Pacheco Polanco

Escritor

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Julio Mauricio Pacheco Polanco