CUANDO ELLA DEJÓ DE SER LA MUJER QUE AMASTE






Qué te puedo decir
¿Que ya no te amo?
No, eso sería herirte
¿Por qué ya no te deseo?
¿Seré otro hombre más que defraude la fe en las mujeres?
Porque todas las mujeres que he conocido me lo han confesado
Fueron defraudas, engañadas y maltratadas por un hombre que dicen, nunca las amó
¿Hemos construido mal el amor?
¿Quién construyó al amor?
O es todo deseo, atracción, lo que se llama sexo y nos puede complicar la vida
No sé, lo dulce se convierte en procreación
Y no he conocido a mujer alguna que no soporte el hecho de haber abortado
Entonces qué, dónde queda tu fe, me dices
Pero yo callo y prefiero no decir nada
Cargar con toda esta pesada culpa
Amarrarme bien el prepucio
Y aguantarme las ganas de follar con todas las muchachitas que no saben a qué se exponen
Porque te veo y me hablas de muchos hombres
Y no siento nada, nada a eso que sentí alguna vez: celos
Qué fue todo esto entonces
Porque me hablas de compañerismo
Y sabes que deseo a otras mujeres
Y ya veo que no te importa
Así tu autoestima esté por los suelos
Y al caminar por las calles antes de ir al trabajo
Solo te quede sentirte orgullosa de estar con un gran mujeriego
Mientras yo esté asustado por las enfermedades de transmisión sexual
O por algún embarazo por más precauciones que haya tomado
Por más de haber verificado si la muchacha no estaba en sus días de ovulación
Porque sé que después de haber sido amadas, ellas me odiarán
Entre risas, diciendo, también fue mío
Mientras van donde su terapeuta para sanar su desamor
Tomando pastillas para no pensar.
Pero no queda ya nada
Solo apagar el celular
Y recordar los días donde te necesité olvidar
Entre la vida y la muerte
Para ahora después de muchos años saber
Que no eres nada para mí,
Y tampoco quiero que lo seas
Si tan solo la atracción entre un hombre y una mujer fuera para siempre
Pero lo sé bien, no hay mujer ni hombre invencible
Es inevitable ser infiel
Mejor dicho, es inevitable que el amor se esfume
Como los orgasmos cuando uno se levanta de la cama
Y solo tiene deseos de hacer el amor con otra muchacha.

Julio Mauricio Pacheco Polanco
Escritor
Todos los Derechos Reservados para
Julio Mauricio Pacheco Polanco

Comentarios

Juan Fernando Sudatti ha dicho que…
Cuanta realidad existe en este escrito para quienes lo afrontaron. Ahora existen hombres, que fueron adolescentes y jóvenes también que vivieron un amor profundo con cada mujer que acepto amar aunque solo fuesen momentos. Sintieron celos y lucharon para que no desvanecieran esos amores.
Fueron más de veintenas y de cada una se sintió profundamente. Amores que desgarraron el alma y siguen haciéndolo pero en el silencio oculto de los pensamientos.
El resto lo saben los protagonistas en el teatro del alma. Siempre una mujer y un hombre.

Saludos para un gran escritor.

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