LAS MUCHACHAS DECENTES SON DE OTRO MUNDO






La convicción tras una modulación de voz persuasiva
Los brazos alzados y la energía en el llamado
El dedo señalando el mundo por todos buscado
La leyenda de haber leído más de 1,000 libros
Esas hazañas que asombraron a los de mi generación
La muchacha se sentó a escucharme entonces
Y me prestó atención durante 5 minutos
Para luego decirme: ¡basta!
Tu voz es muy melodiosa y vehemente
Tus gestos son perfectos como tu seguridad
Pero hablas en metáfora
¡No te entiendo nada!
Eres más bello en tus poemas que en persona,
¿Por qué?, le pregunté
Porque estás loco, Mauricio, no entiendo nada de lo que dices
A pesar que hablas con mucha seguridad
Como si fueras una nueva verdad andante
Me pregunto cuándo será el día que vivas las palabras que dices
Cuando entiendas lo que ahora dices
Y puedas ordenar lo que hay en tu corazón
Del cual nada dudo, porque a pesar de estar lleno de buenas intenciones
A pesar de ser escritor, no entiendo nada de lo que dices
Y solo has hablado 5 minutos
Y estoy muy perturbada.
Y así es la leyenda de mi soledad
Y el por qué le pago a las trabajadoras sexuales por placer
Con ellas no se habla
Las muchachas decentes simplemente
Son de otro mundo.

Julio Mauricio Pacheco Polanco
Escritor
Todos los Derechos Reservados para
Julio Mauricio Pacheco Polanco


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