He leído aquí y allá, por decirlo de alguna forma, en los Grupos de Literatura de Facebook que, los Escritores se enfrentan siempre ante editores que solo quieren sacar ventaja sobre sus obras, cobrándoles por servicios de maquetación, corrección de estilo, diseñó de portadas y el costo de impresión, más publicidad, costos, atención, que corren por parte del Autor. ¿Qué los conlleva a tomar esta decisión en medio de su gran entusiasmo por querer ver su libro publicado y publicitado gratuitamente por Google, si es que tienen su Blogger que también es gratuito, sin darse cuenta que al hacer uso de estos servidores, no necesitan de rogarle a sellos editoriales que solo publican a escritores conocidos a los cuales solo les pagan a lo mucho un 10% de regalías y, todos los demás gastos, de ser publicados, entre viajes a Ferias Internacionales de Libros en diferentes partes del mundo, corran por cuenta del Escritor, claro está, si es que los sellos editoriales tradicionales, decidieran publicarle a uno, porque la otra vía, la de autofinanciarse, termina siempre con habitaciones llenas de libros que solo sirven para desconcertar al Autor que sabe, su obra es muy buena y, no ha sido apreciada por los lectores a los que quiso llegar. ¿Hay plataformas donde se pueda publicar gratis y los visibilice en Google si es que sabe utilizar las palabras adecuadas para que los motores de búsqueda, según los intereses del que navega en la web, se encuentren con la obra del Autor? Claro que las hay, particularmente tengo más de 16 libros o novelas, publicadas en Amazon, en habla castellana y, si bien, no pago en publicidad para que se promocionen mis novelas, hago uso de otras herramientas que brinda la tecnología, sean Facebook, Google, o la plataforma de Amazon. Entonces, ¿hay un mal enfoque en la afirmación que el Escritor se sienta discriminado? Los Escritores sabemos que tenemos diariamente algo qué decir, si escribimos diario y, por ejemplo, somos leídos en España, o Alemania, Israel, USA o Rusia, si es que debo puntualizar que el castellano está de moda en esos países, entonces hay un camino mediante el cual, entiendo, la queja, tiene una solución, más aún en estos momentos de crisis, donde, no solo los Escritores que, solo sabemos escribir, no tenemos trabajo y, si lo hubiera, tenemos como enemiga a la pandemia que nos estresa y atemoriza. Mi reflexión me dice que trabajar desde un Blogger es como tener un teletrabajo, ¿remunerado?, pues eso depende del aporte del Autor, de lo que pueda entregar a sus lectores que ya tienen bastante con la pandemia y solo quieren pensar en otras cosas y, allí, entramos a tallar los Escritores, porque leer desde un Blogger, resulta gratis y, si además, este Blogger responde a una necesidad del lector, facilitándole lo que necesite, las posibilidades son tangibles al momento de ver a una web o a un Blogger como un teletrabajo donde uno mismo es su jefe, sea desde su habitación o sala, desde el lugar de su casa, en este tiempo de confinamientos, donde la ocasión entrega soluciones para poder decir que ser bloguero es un trabajo propio, a horarios libres o a escoger, sin tener que ser editado por un sello editorial que no valore la obra de los Escritores o, bajo contratos a favor de los sellos editoriales, perjudiquen a quienes solo sabemos escribir. La pandemia no será definitiva, pero cambiará si es que ya cambió nuestros hábitos hasta que sean costumbres normales, y en este punto de quiebre, todos tienen una muy larga historia qué compartir, y lo que más ama un lector es saber cómo son las experiencias, conocimientos y conclusiones, desde el punto de vista de quien escribe con su punto de vista que, a mi entender, nos alivia, humanizándonos y hacernos evidenciar que nuestros miedos son comunes, como alegrías y cotidianidades, que sirven para derrotar a la soledad y dicho sea de paso, para relajarnos, tranquilizarnos y hacerle frente a momentos difíciles propios de este tiempo. Así que usted siendo Escritor, ha esperado 6 meses la respuesta de un sello editorial, esperanzado en que le publiquen, para mediante un e-mail frío e impersonal, les respondan con palabras protocolares: desestimado o, quieran sacar ventaja de su talento y busquen beneficios para ellos, que en vez de reconocer su obra, encima quieran que usted se autofinancie su obra que es su Capital de trabajo, sin que le garanticen que se vendan sus libros, que es lo que usted desea, debe ser por el no haber percatado que hay un Capital gratuito en las plataformas que publican gratis como Amazon, desde donde es visible para sus amistades desde Google o Facebook, y otras redes sociales, si así se empieza en esta profesión donde muchos creen, es un decisión equivocada, cuando en esta pandemia hemos meditado mucho entre el trance de la vida y la muerte, qué es verdadero para nosotros como personas y, qué haríamos, si nos dieran una nueva oportunidad, para estar vivos y, empezar con toda nuestra determinación, por aquel sueño que fue aplazado hasta antes de la pandemia y, ahora, que se nos da una nueva oportunidad, comprendemos que dentro de lo que es esencial, es también esencial, abocarse a realizar lo que siempre se quiso hacer, así sea sin recursos económicos, porque hay un Capital al alcance de todos en internet, y los lúcidos lo hemos identificado sin que debamos invertir una sola moneda, para tener ingresos, desde este mundo nuevo.
Julio Mauricio Pacheco Polanco
Escritor
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