EL ESCRITOR QUE ES CENSURADO POR FACEBOOK
Acabo de ser censurado otra vez por Facebook por
escribir en contra del Crimen Organizado, la corrupción, la necesidad de que el
mundo funcione con La Palabra, en contra del alcohol y las drogas, de la
ideología de género, de las feministas y su discurso pro aborto, cuando
divulgué todos los métodos científicos para evitar embarazos no deseados y,
luchando contra el Mal que hay en el mundo. No podrán callarme siempre. No es
la primera vez que me censuran, este es un mundo donde el ser impoluto es
censurado, donde querer practicar El Bien es condenado. Solo me queda escribir
desde mi Blogger, ya no puedo publicar por enésima vez por los grupos de Facebook,
que si ellos están de acuerdo con todo lo cual me enfrento, es cosa de ellos,
ya fui amenazado por Google de desaparecer de la web con todos mis escritos a
inicios de año. Alguien debe decirle al mundo todo lo que está mal. Si no lo
hacen ustedes, lo seré yo. Les pido por favor, pasen la voz a las demás
personas sobre este Blogger que es gratis y no se monetiza. El mundo está muy
mal y necesita de testimonios de personas que se enfrenten contra todo ello. No
queremos que destruyan más a nuestras generaciones con trasnsexuales dándoles
clases a niños sobre sexo, ni que los homosexuales violen en grupo a los
heterosexuales o que nosotros, seamos los que estemos en la mira de los
desviados, porque me lo han dicho: “nos excitan con los homofóbicos”.
El mundo está mal y para eso se requiere de
Escritores que denuncien todo aquello que daña al mundo. Pueden leer todos mis
escritos y ver todas mis denuncias. No me van a callar ni muerto. Así sea el
último de esta generación que quede en pie, porque esta vez la censura es
total, sin aviso de cuándo poder volver a publicar en los grupos de Facebook.
El mundo pudo haber sido mejor después de esta
pandemia, pero empeoró y la corrupción se hizo mayor, envileciendo más a
cientos de personas que la usaron para hacerse ultra ricos.
No hay a quien creer. La literatura en mi
localidad está llena de alcohólicos y drogadictos como bisexuales y les dan
esos libros a leer a los niños y adolescentes.
El último que queda soy yo, marginado y
excluido por tener un discurso en contra de sus excesos y desviaciones. Los sellos
editoriales de Lima me niegan publicar mis escritos y publican a autores que
escriben más de lo mismo sin aporte o lucha alguna.
Así es la literatura en plena pandemia, así son
los sellos editoriales, así son los autores que son publicados mientras se
drogan y alcoholizan y se bisexualizan, mientras escribo por un mundo mejor,
para los niños, que siendo víctimas de la intelectualidad mundial, ha transado
con un sistema podrido, que solo entrega libros que dañan a sus lectores y les
destruyen sus ideales.
Julio Mauricio Pacheco Polanco
Escritor
Todos los Derechos Reservados para
Julio Mauricio Pacheco Polanco
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