VEO AMOR EN TODAS LAS MIRADAS

 

Esos aromas del amor, los olores de orgasmos donde las personas vencen a la existencia

-las calles y largas avenidas son lugares donde se mezclan muchas historias que desconocemos-

Sentado a la mesa, ordeno mi agua de soda mientras veo otra vez muchachas de otros países

Esos ojos claros parecen reflejar los míos, probablemente estén buscando su príncipe de amor

O quizás escapando de algo que ni tú ni yo podremos comprender

-en las fábricas los operarios siguen haciendo andar el mundo-

En la mañana casualmente me encontré con el V:. M:. de grado 33 y

Ya no tuve necesidad de saber de su conocimiento o sabiduría

-pensé que todo lo que tuvo que enseñarme fue dado y que ahora era yo mi propio maestro-

Pude percatar la tristeza y alegría en sus ojos, como quien se dice: por fin Mauricio ya no me necesita

Y pasé de largo para entrar en una ciudad donde la marcha es apurada

Donde veo mujeres con el vientre preñado

Y los ojos de nuevos niños que ignoran todo lo que hemos pasado

Como el cielo donde me he quedado antes que parta a recorrer el mundo

Y saber de la historia de las piedras angulares o las leyendas sobre la piedra filosofal

Que entre mis manos y donde vea, debo dejar pasar las derrotas de los demás

Si las mías están libres de sangre mas no de compasión

Que de mis rituales contra la muerte no tengo más nada sobre qué escribir

Apenas algunas palabras para decir adiós

Como la madrugada en que la Luna se me manifestó con todo su poder

O las otras noches donde me interrogué como se interroga aquella persona que ha vivido siglos

Que si bien antes de la pandemia, por las mujeres más aguerridas

Era considerado como un filósofo, un varón sabio

Ahora que tengo el cabello más blanco y la mirada calmada

Como quien ve a todas partes y se siente amado

Debo entender, Dios pone ángeles donde son necesitados

Para recordar que no estamos solos, si ese ángel soy yo

Y en mi bendición he sido perdonado por ser un ser humano

Alguien que ha tomado consciencia de todos sus errores

Y a quien se le ha entregado la oportunidad de renacer y estar limpio de todo

Si así, el olor a orgasmos es intenso

Y así no quiera dejar hijos, veo amor en todas las miradas

Y esto sí vale la pena, ¡claro que sí!

®Julio Mauricio Pacheco Polanco

Escritor y Pensador Libre

Arequipa, Perú

 

Comentarios

Entradas populares de este blog

MANUAL PARA NO DESPERDICIAR LAS NOCHES

EL POEMA QUE HONRÓ AL MUNDO

EL CORAZÓN QUE VOLVIÓ A SU DUEÑO