NO TE PROCREES

NO TE PROCREES

 

Llegar a los 50 años y estar tan lleno de mundo

Como para saber que me salvé del matrimonio, los hijos

Y toda una existencia desdichada

-no se trata, escuchen bien mujeres, no se trata de tener más hijos-

-no creo que sea buena idea seguir poblando este mundo-

¿mandarás a tus hijos a la guerra o a los hospitales?

Mira que aquí todos son esclavos de alguien

Algunos de sus trabajos, otros de la dependencia de alguien

De una religión o hasta de los libros que estudian

-contemplo el arder del fuego y me dejo hechizar por su encanto-

Conocí miles de mujeres, lo suficiente como para solo hacerles el amor

Y decirles que se retiren de mi apartamento, que quiero estar solo

-enseñarle a un niño a ser bueno y practicar el bien es errado-

-la iglesia católica tiene santos para cada verbo-

-donde hayas nacido, ya tienes una forma de pensar de la cual duramente serás libre algún día-

El único lugar sagrado con el que contamos es nuestra mente

-la gente vende su mente porque cree que todo se trata de vender-

Vendes tus pensamientos, tu paz, tu tranquilidad

¿alguien me puede decir cómo se puede detener todo esto?

El amor es una emoción que te obligan a buscar sin que nadie le halle

-las escritoras te dan recetas para amar sin haber conocido el amor-

-las personas siguen un libreto para vivir porque no saben cómo vivir-

¿te han impuesto creencias para existir?

-buscas las verdades y llega el día que te das cuenta que nada aquí está resuelto-

No sabemos por dónde saldrá el Sol mañana y esto lo sabemos todos

Pero nos acostumbrados y dejamos pasar lo esencial para no saber qué hacer

-esos radicales revolucionarios pretenden saber cómo enseñar a vivir-

-inventan magisterios para hacer pensar a los niños-

¿te han enseñado a ver desdicha donde solo hay felicidad?

Cierro la ventana de mi habitación, el aire es puro, pero igual al cierro

Estoy pensando que en nada estoy equivocado

Pero es mi experiencia como de igual forma, tendrás tus propias experiencias

Que al final del camino, éstas no cuentan para nada

Si debas elegir algún Dios para estar en paz

Ante el encuentro final con todo lo que no se pudo explicar en vida.

 

©Julio Mauricio Pacheco Polanco

Escritor y Pensador Libre

Arequipa, Perú