ESA GUERRA LLAMADA: AMOR



 

Si supieras que el amor es mortal

No dejarías pasar a esas muchachas que llevan una vida alegre

Si pensaras que es el final

Debes saber que hay casas de luces rojas donde todo es placer y felicidad

Antes, escucha, antes que te entregues al alcohol y otras drogas,

Antes que caigas en los engaños de ese que dice ser tu amigo y en el consuelo, tú no lo sabes, te desea

Lee bien, cuando el norte haya desaparecido

Cuando el corazón y la fe finalicen

Después de tantas batallas para no perder lo más amado

Cuando deliberes entre el bien y el mal

Y el mal sea el suicidio

Y la soledad sea el peor castigo si ésta sea propia del amor perdido

Si creyeras que nada volverá a ser igual

Que dejaste de ser tú

En la madrugada que cantes a todo pulmón, el dolor de su ausencia y conmovidos, los hombres de mundo, nos unamos, para recuperar a quienes se les acaba de abrir las puertas del cielo

Si esta tradición es milenaria

Te diré que no temas

Un libro muy extenso has acabado de vivir

El libro donde casi todos hemos escrito lo mismo

Si supieras, miles de muchachas más bella de la que creíste insuperable

Ansiosas de saber de tu leyenda

De tus locos deseos de amar sin cesar

Desde las puertas de sus alcobas

Sedientas de ti, esperan darte el consuelo en el que son expertas

Para querer saber de tu manera de amar

Cuán intensos han sido tus sentimientos

Cuán fuerte es tu pasión

Cómo es la locura que te hace mover como un toro enfurecido en busca de paz

Si has tenido la suerte de salir libre y sin marca en la piel, salvo las propias del sexo violento y del orgasmo más intenso de la despedida

Sabrás qué es un varón libre

Un hombre que se desplaza entre muchachas que eligieron el camino de la alegría

Un camino que no quieren dejar

Anhelosas de saber de esos males de amores que sólo ellas saben saciar

Así, estimado lector

Justo en el viaje de retorno, cuando dentro del bus que viajas, no quieras que el trayecto acaba jamás

Las lágrimas que liberes sean curadas con perfumes santos y cabelleras doradas con delicadezas propias de la dulzura que aún desconoces y, va más allá de eso llamado amor

Y en los días que precedan, te veas entre pasillos, más vivo que nunca, rodeado de las damas del amor, en sus mejores encajes, deseándote como sólo tú aprendiste a desear

Es una tradición, debes saberlo

Que al momento de haberte dicho adiós

En todos los intentos de destruirte para que no goces de las miles de muchachas que desafían a todo para tenerte en sus lechos

Deberás ser más fuerte que tus sentimientos ya no correspondidos

Porque sólo de esa manera se derrotan las maldiciones

Los caprichos de la que no supo amar

Y en su orgullo, conoce el camino que te espera

Entre muchachas más jóvenes y bellas que ella

Quiera aniquilarte totalmente

Antes que abras esas puertas donde sólo cohabitan los que son felices

Los que han vencido

Como es costumbre y ha sido desde que el hombre es hombre y, la mujer es mujer

Si debas comprender, se pierde una vez

Para ganar miles de veces

Si el ganar cada vez, sea una dama del amor en cuyos ojos verás la pasión

Hasta que termines saciado

Hasta que un día de pronto

Termines siendo sabio

Sin ningún recuerdo ni deseos de venganza

Que hay marchas que cuando no se retornan

Lo reza el destino, son para conducirte con experiencias propias de los que vencieron

Los que no tuvieron la culpa de no haber sido bien amados

Si leyeras esto a su momento

Y si volvieras a leerlo

Cuando hayas superado récords que otros antecedieron

En esa guerra llamada: amor.

 

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