EL HOMBRE FELICIDAD
Transitar por las calles donde amé
Caminar hacia los hoteles discretos donde están ellas
-si lo tengo todo, por qué amar como antes
-antes de mis 20 años amaba de verdad
-ahora lo tengo todo, amor comprado sin negación a nada
-¿qué es mejor entonces’
Considerar que estoy por cumplir 54 años y no tengo hijos
Es mejor abrirse paso sin tener preocupaciones
Si el esperma se derrama, cojo el preservativo y lo hecho al wáter para
jalar la bomba y no tener miedo a nada, ¿esto lo escribí antes?, la respuesta
es sí, son viejas costumbres desde que supe que ellas abortan a último momento
cuando entran en razón
-el padrote me preguntó qué le había hecho a la muchacha, dejó de
trabajar toda una semana y, no dejaba de preguntar por mí
-ella rompió sus reglas, se dejó prolapsar
-22 años para disfrutar en una muchacha que enloqueció cuando la hice
mía
-nunca hizo caso al cronómetro del celular
-seguíamos haciendo el amor sin detenernos y me pedía que no pare
-¡eso sí que es vida!
-¿conoces otra forma de dicha?
Que si aprendí a evadirme de todo así, pues es mi sabiduría, por eso no
creo en la muerte ni en las enfermedades
¿Pensar en las muchachas de cuando tuve 20 años y sólo se dejaban besar?
-eres muy aprensivo, Mauricio, quieres hacerles el amor apenas las
conoces, lo tuyo es sólo con putas
-las muchachas de la vida alegre tienen mi instinto, no quieren
cortejos, quieren sexo de inmediato y, en esto no hay enfermedad, sólo deseos
de sentirse felices, sin tener que soportar las acusaciones de una sociedad
hipócrita
-¿viste el amaneces con diferentes muchachas desde la habitación de tu
propio apartamento?
-dormí erecto dentro de ellas para despertar y hacerles el amor una vez
más
¿Dónde queda el hombre felicidad?, preguntan ahora las muchachas
ansiosas de sementales que lo sepan todo y, ese todo significa ser un maestro
que no se enamora, sólo rinde culto al placer, a los instintos más atávicos,
propios desde el paleolítico
-qué lees, eres escritos y en tu apartamento no hay libros, me pregunta
la muchacha
-leo la vida, eso es demasiado
Ella faltó a su trabajo y esperó mi llamada, porque me dio su número de
celular, naturalmente que no tuve tiempo para eso, llamaba por otras muchachas
para hacerlas mías
-¿sexismo?, no, ellas también sienten, de lo contrario no seguiríamos en
este mundo como especie
-¿machismo?, no conozco a mujer que se deje amar por alguien que no haya
superado todos los rituales, es sólo sexo por sexo
Este es un mundo donde la gente aprendió a hablar con mentiras,
¿salvarlo?, por qué entregarse a causas donde otras personas quieren ver arder
la ciudad
Las ciudades son eso, llegas a ellas y lo primero que preguntas al
chofer es: ¿dónde están los lupanares? Entonces, a qué vas a otras ciudades, ¿a
Ferias de Libros donde te presentarás? Perdón, dónde están las mejores
muchachas de la vida alegre.
Mires donde mires, si le pones atención a todo, podrías entrar en
depresión, mejor llama a las que nunca dicen No, ahí está la vida, no insistas
más.
Pasada la semana, volvió a su trabajo, el padrote me dijo que dejó de
preguntar por mí, que retomó su trabajo con una salvedad: quería conocerlo todo
en la cama, el sexo fue su respuesta, el iniciador, sólo yo, después de todo,
¿para qué carajos se hizo la vida?
Comentarios